Realmente quienes somos

Un llamado a la reflexión.

Parece que con un poco de humor algunos compañeros que laboran en el Titanic han querido iniciar una protesta por la forma que algunos compañeros han sabido manejar los recursos para mejorar sus propias condiciones laborales y que los han titulado Los de Sangre Azul.

Al referirme a este asunto, no quiero hacerlo sembrando cizaña, como algunos irrespetuosamente han convertido el comentario del famoso PAOYES, que reflejando una inconformidad del personal ha logrado que algunos (as) utilizando seudónimos, insultan y ofenden a quienes de una u otra forma expresan lo que no se atreven a decir en el momento oportuno.

Recuerdo como en octubre de 2005, después de una larga reunión con Mister DAG, muy pocos se atrevieron a manifestar cara a cara lo que realmente estaba sucediendo a los interno del Titanic como por ejemplo desánimo del personal, las condiciones de varias oficinas, el comedor, condiciones del edificio, sólo para mencionar algunas, empero principalmente nuestra seguridad laboral tanto de los que trabajamos dentro o fuera del Titanic y, como después de todo se logró que una vez más las cosas se mantuvieran como a la fecha, es decir; no se logró absolutamente nada y una simple pero contundente respuesta valió para acallar a todo los reunidos en la Sala de Sesiones cuando dijo Mister DAG “Ustedes no se lo merecen” y la enemistad entre dos compañeros por decirle las cosas en la cara. En otras ocasiones han defendido salarios y últimamente ante el HCM del Titanic se han enfrentado con Mister DAG y este se ha dejado decir que sean invertido más de 25 melones en la reparación y acondicionamiento del Titanic. ¡Que mala inversión por cierto!

Somos muy dados a comentar entre corrillos, a quejarnos y muchas veces hasta mofarnos de los compañeros por las luchas que emprenden para tener un mejor lugar de trabajo. Es cierto no existe en nuestra ciudad buenas fuentes de empleo como para escoger donde laborar y de nuestro trabajo dependen principalmente nuestras familias. Pero también, es cierto, que no trabajamos en cualquier parte, todos los que aquí lo hacemos representamos a la institución más importante del cantón como lo es el Titanic Local.

Considero que muchas veces algunos ardientes han llegado muy lejos defendiendo causas que a la postre por tener un sentido de responsabilidad y compañerismos han dado la cara, arriesgando muchas veces su estabilidad laboral por otros, que como los avestruces, cuando se tienen que enfrentar a defender sus derechos, entierran la cabeza y manifiestan que están bien y comprenden que la situación no esta para invertir en mejoras de los espacios de trabajo.

Todos dependemos de un Mister o una Lady que dirige cada dirección y que así como los que no son productivos defienden sus derechos y sostienen en el PAO sus necesidades, cada encargado responsable de su personal debería defender a sus pupilos, pero lamentablemente atacamos realmente a los menos indicados.

Es tiempo de comenzar por analizar cada situación y valorar realmente quienes somos los que sostenemos esta institución. Nos hemos dado nuestro lugar para defender nuestros derechos profesionales, o es qué un título nos hace más que a otros, pero qué sino fuera por los de abajo, qué sería del Titanic?

Y si alguno (a) quiere hacer sus comentarios esta en la mayor libertad de hacerlo pero que recuerde que el escudarse detrás de un anónimo es de cobardes.

Firma responsable ojqs.